El paso de primaria a secundaria es un cambio muy grande en el que los niños/as pasan de ser los mayores del colegio a los novatos del instituto, tienen más horas de clase, más número de profesores y un trato más adulto lo que provoca que para algunos niños/as puede ser difícil abordar todos estos cambios.
Para que este tránsito sea más sencillo y no produzca estrés o nerviosismo en el niño/a los padres deben trabajar desde casa atendiendo a una serie de pautas para mejorar la entrada del nuevo curso y percibir cualquier cambio en el niño/a una vez hayan empezado las clases:
- Abordar de forma positiva la entrada en el instituto, hablando de los profesores y compañeros que va a conocer este curso.
- Elaborar un horario de estudio diario en casa, con el que le sea más fácil organizarse.
- Mantener un contacto continuo con el profesorado y el instituto.
- Estar informado de su círculo de amigos y la influencia que puedan causar en sus progresos.
- Elogiar y motivar al niño/a en todos sus avances y aprendizajes.
- Estar atentos a los cambios que pueda experimentar (nerviosismo, mal genio, …) ya que pueden estar motivados por algo externo.
- Controlar el uso de las nuevas tecnologías.
- Y sobre todo, ponerse de acuerdo a la hora de establecer normas entre ambos progenitores.
- Todo debe ser consensuado con el niño/a de ahí la importancia de establecer una comunicación diaria acerca de lo que el niño está viviendo en el instituto.
Cada uno de estos puntos, no son más que ideas a tener en cuenta a la hora de acercarnos a la realidad de nuestros hijos/as y ayudar a que la entrada a un nuevo curso no se convierta en un camino cuesta arriba.
Coral López Lozano. Pedagoga.